Un día, José y María paseaban por la montaña con su perra. La perra era pequeñita , peluda y bastante traviesa.
Vieron un gatito blanco y José intento tranquilizar a la perra que se puso nerviosa.
.El perro ladraba y José y María lo ataron con la correa al árbol.
José le decía que se callara.
En eso el gato salió y se subió al árbol y así estaban todos tranquilos.
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