Diego

Había una vez unos amigos. El se llamaba Ashan y ella Rodolfa. Iban con su perro por el bosque.
De repente el perro se puso a ladrar porque vio a un gato feo y creído que les asustó.
Ashan fue a coger al gato que arañó a la niña.
Ataron el perro a un árbol con la correa. El ladro ladró y ladró. Entonces el gato se calmó porque Ashan le acarició y Rodolfa lo cogió. 
Lo llevaron hasta el perro que con todas sus fuerzas rompió la correa. El gato se asustó y se subió al árbol para que el perro no le cogiese.
Finalmente, el perro fue a por el y así terminó la historia.